No veáis, que afición que he cogido a los yogures naturales, además de saludables, y baratos están deliciosos, yo los tomo hasta sin azúcar, pero eso va en gustos.
Utensilios:
- Un bol de ensaladas; de loza, plástico o similar.
- Una cuchara.
- Unas varillas para batir la mezcla.
- Un cazo para distribuir la mezcla.
- Los 7 vasitos de la yogurtera, (si es que es de 7).
- La yogurtera.
- El enchufe (por supuesto).
- Un yogur comprado, (sólo la primera vez). El resto de veces con uno de los que hayamos elaborado.
- Un litro de leche (entera o semidesnatada).
- En el bol se vuelca el contenido de un yogur, ayunándonos de la cuchara.
- Añadimos el litro de leche encima.
- Batimos enérgicamente con las varillas (o tenedor).
- Con el cazo distribuimos la mezcla en los vasitos de la yogurtera.
- Ponemos los vasos dentro de la yogurtera sin las tapas.
- Tapamos la yogurtera y enchufamos.
- Esperamos toda la noche, (el consumo eléctrico es ínfimo).
- Desenchufamos el aparato y sacamos los yogures.
- Dejamos enfriar a temperatura ambiente durante dos horas.
- Tapamos y al frigorífico.
Nota: Si no tenéis vasos porque se os han roto, los venden sueltos y
además ahora tienen tapa giratoria para poner la fecha de elaboración pues como
no llevan conservantes, ni colorantes, ni aditivos, ni EEEE…sólo duran 5 o 6
días, pero eso no es problema pues se "ventilan" antes.
Coste:
1 € incluida la luz consumida. Es decir, 15 céntimos de euro cada uno. En la tienda cada yogur sale aproximadamente a 30 céntimos (y lleva aditivos). La mitad que los yogures industriales.
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