Utensilios:
- Un bol para hacer el preparado.
- Un yogur con su vaso, (que será nuestro medidor).
- Un recipiente adecuado para hornear.
- Unas varillas o tenedor para batir.
- Una lengua o rebañadera para aprovechar bien la masa.
- Y por supuesto los ingredientes y un horno.
Ingredientes:
- 3 huevos medianos de unos 65 gramos cada uno.
- Un yogur natural de los que ya hemos aprendido a hacer.
- La capacidad de medio vaso del yogur de aceite de oliva o un vaso entero si es aceite de girasol.
- La capacidad de 2 vasos del yogur llenos de harina, (mejor maicena o harina de repostería).
- La capacidad de vaso y medio del yogur lleno de azúcar.
- 1 limón.
- 1 sobre de levadura en polvo.
Proceso:
1) Poner a
calentar el horno a 230º C sin turbo, es decir resistencia por abajo y por
arriba.
2) Mientras se
calienta, en un bol se baten los huevos.
3) Se añade todo el
contenido del yogur.
4) Se añade el
aceite batiendo.
5) Echar el zumo
del limón recién exprimido y la ralladura de la cáscara.
6) Añadir la harina
batiendo.
7) Verter el
azúcar batiendo.
8) Seguir moviendo
mientras añadimos la levadura.
9) Cuando tengamos
una mezcla homogénea, engrasar el molde que vayamos a meter en el horno.
10) Verter la masa en el recipiente que hemos
engrasado, arrebañando muy bien.
11) Como el horno ya se habrá calentado, meter el
recipiente sobre una rejilla poniéndolo más cerca del suelo que de la parte
superior del horno.
12) Hornear durante 10 minutos a 230º C y otros 10
minutos a 200º C y mantener dentro del
horno hasta que se enfríe. Desmoldar y listo para degustar.
Resultado y coste:
Yo he elegido un molde de silicona y por lo tanto no he tenido que
engrasar y el coste ha sido de 2 euros y 10 céntimos incluyendo el consumo eléctrico.
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